¿Tú has estado en una relación donde no te sientes valorada, respetada y amada?
Entonces, éste post es para ti.
Siempre el tema pasa por la auto-indagación.
Es no
poner la visión hacia fuera, hacia las personas que no me brindan todo lo que
deseo sino todo lo contrario, mirarnos a nosotros mismos.
Con una mirada franca, sincera, y bondadosa.
En que no me amo, no me respeto o no me atiendo.
Tomar una a una las palabras.
Y decir Yo no me
estoy amando porque….
No me estoy respetando porque acepto lo que no quiero…
Yo no me valoro porque me siento...
Vale la mención: “Si juzgas a las personas no
tienes tiempo para amarlas” – Madre Teresa
¿Tú te juzgas? Seguramente sí y mucho!
Tanto que establecemos situaciones que no nos
gustan, o estamos con personas que no nos gustan.
Comprendiste hasta éste punto?
Te juzgas, no te amas, no te amas, te acercas a
personas que te mostrarán lo mucho QUE NO TE AMAS Y QUE NO TE VALORAS. Comienza
los roles víctima y verdugo.
Si conoces la Biodescodificación, sabrás, que
traemos con nosotros programas, creencias limitantes.
Lo cual puedes comprobarlo fácilmente, porque en
tu vida se repiten una y otra vez.
También puede
haber una comparación de cómo deben ser las relaciones “para ser buenas
tienen que durar”, o por el contrario, hay una creencia en el fracaso.
Pues ni
la una ni la otra son correctas, ya que toda experiencia nos da aprendizaje.
Seguramente has experimentado que en algún momento
de tu vida tienes unos amigos, y en otro momento a veces ni tan siquiera sabes
por qué ya no hay más necesidad de verlos…
Pues bien, lo que tenías que experimentar con esas
personas ya está, y te mueves hacia otra cosa.
Otra tendencia será cuando elegimos la soledad,
estar solo para no reactivar estos programas como medida preventiva o sea por
miedo a lo que te ha sucedido te paralizas, mejor me quedo quieto así no me
dañan.
4 PUNTOS para relacionarte, ya sea en el plan de amistad o pareja.
1- Auto
indagación
2- Confiar
en ti
3- Poder estar solo contigo mismo
4- Comenzar
un vínculo nuevo, sin temor,
sin traer el pasado de otras relaciones que pueden
ser parecidas.
Darte la oportunidad de explorar esta nueva relación como tal:
NUEVA.
Luego de todo esto,
verás que siempre el infierno, el dolor intenso, ha estado en tu temor a
indagar en ti. No necesariamente tenías que terminar con una persona o comenzar
rápidamente un nuevo vínculo para tapar lo que no querías ver.
Lo que no querías ver
era tu HERIDA.
Piensa
que tu eres alguien con quien vale la pena pasar el tiempo.
Y recuerda que: al
sentirnos separados hacemos cosas para agradar a los demás.
De ese modo nos desconectando de nuestra propia naturaleza.
La aceptación
personal, la aceptación de la propia historia nos puede permitir empezar a
vivir en paz.
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